Una amapola que crece al otro lado de la valla de alambre, en la escasa tierra que permanece entre los troncos y tocones apilados durante todo el invierno. Destaca el rojo de la corola entre la diversa gama de grises. Realmente no hay truco ni engaño, la imagen era tal como la presento, sin ningún retoque ni modificación. No siempre es fácil captar el instante que el ojo percibe; simplemente se trata de encuadrar y disparar en el momento preciso.
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