martes, 30 de junio de 2009

Sapporo, destino final

Después de 22 horas de viaje y tres aviones distintos alcanzamos el destino final en el “país del sol naciente”. Si sumamos las siete horas de desfase horario, perdemos la noción del tiempo y desconocemos el día en que vivimos. En esta época del año a las 5:30 ya es completamente de día, lo cual acaba de destrozar mis biorritmos internos para una buena temporada. La gente es superamable y la comida excelente!!!

lunes, 29 de junio de 2009

De viaje: segunda escala

domingo, 28 de junio de 2009

De viaje: primera escala

miércoles, 24 de junio de 2009

Amanece

Antenas. Nubes rosadas aparecen por el este. Los azules del cielo resaltan bajo el efecto de la luz de tungsteno. Después de la noche más corta del año, un nuevo amanecer. Es el día del Imperio del Sol Naciente!!!

martes, 23 de junio de 2009

Todo un espectáculo

Una vez que se pone el sol, los pájaros salen a patrullar por el cielo. Son de esos aviones que no paran quietos un momento, con sus vuelos acrobáticos e incluso a veces imprudentes. Por la noche sin embargo, aparece una pareja de murciélagos urbanitas que tiene querencia por el barrio. Nooteboom también tiene un “murciélago” en su “Lluvia roja”, una gata gris de raza cartuja, gracias a su afición a visitar monasterios cartujos en sus viajes por España.
Es verdad que a veces la vida te juega una mala pasada pero, a pesar de las dificultades, hemos de ser capaces de levantarnos una y otra vez. Recuerda, amigo Ripley, que no hay nada irremediable más que la muerte. A pulso, como un campeón.

lunes, 22 de junio de 2009

Norte de Siete Picos

La cara norte de Siete Picos desde Valsaín. Todavía se conservan en la zona importantes restos de la guerra incivil, testigos de la barbarie de la especie humana pues no en vano en estos parajes, en tres desastrosos días, acabaron muriendo cerca de 2.500 hombres jóvenes. Hace más de 70 años de la batalla de La Granja pero todavía permanecen la memoria y los restos de hormigón. La mitad de los muertos se contabilizaron en un bando, la otra mitad en el contrario. Ciertamente ninguno de los contendientes ganó esta batalla, aunque posteriormente unos vencieron y otros perdieron la guerra. El odio y el rencor se instalaron durante largos años. Desde el fortín se controlaban todos los pasos del valle de Valsaín, con vistas a las cumbres de Peñalara y Siete Picos.

domingo, 21 de junio de 2009

Desde las lomas de la sierra

Los azules intensos del cielo contrastan contra la blancura de las nubes. El espejo del embalse de Santillana y el relieve de las montañas: la Pedriza Anterior coronada por el Yelmo, la pared de Santillana y el cerro de San Pedro atravesado en sus entrañas por el tren veloz que une la capital con las provincias del norte. Al otro lado de la llanura, ocultos por la bruma, las casas colmena y los edificios de la gran ciudad. A pesar del día caluroso, el aire sopla en las cumbres. Ni un alma se asoma por estas alturas invadidas por la paz y la tranquilidad.

“En el sonido de la campana del monasterio de Gion resuena la caducidad de todas las cosas. Como el sueño de una noche de primavera, así de fugaz es el poder del orgulloso. Como el polvo que dispersa el viento, así los fuertes desaparecen de la faz de la tierra”.

sábado, 20 de junio de 2009

Desde el balcón

De nuevo desde el balcón con el skyline de las montañas y el perfil de los bloques vecinos, nubes de tormenta y las potencias que iluminan la escena como si se tratase del día del juicio final. Siempre me llamaron la atención estas potencias que surgen de las nubes, espectaculares en ocasiones (las típicas imágenes de “y Dios creó el mundo”). Algunos pájaros rompen apenas la monotonía del cielo.

viernes, 19 de junio de 2009

La Virgen de las Nieves

Se alza en un pedestal rocoso dominando la llanura madrileña en las inmediaciones del Bar de la Bola, bien por encima de los dos mil metros de altitud. Uno de los puntos culminantes de la sierra de Guadarrama. Las nubes contribuyen a realzar su silueta, donde destacan los esquíes a la espalda y el mínimo toque de color que proporcionan las flores artificiales.

jueves, 18 de junio de 2009

La Bola del Mundo

Desde lejos no se aprecia más que un puntito de luz roja en las noches claras, bien desde Madrid o desde Segovia pues se encuentra prácticamente a medio camino de ambas ciudades castellanas. La montaña, con el conjunto de construcciones que colonizan la cumbre, es conocida coloquialmente como la Bola del Mundo aunque su verdadero nombre es el alto de las Guarramillas y supera con creces los 2.200 metros de altitud. Una vez al lado de las estratosféricas antenas, tengo la impresión de encontrarme junto a los miembros de un coleóptero gigante, asentado en lo más alto del monte. Las figuras humanas, en comparación, no son más que insignificantes puntitos como los que aparecen a la izquierda de la imagen.

miércoles, 17 de junio de 2009

Myosotis

Una flor azul bien especial, el myosotis o “nomeolvides”; encontré algunas matas en la braña de los tejos, un paraje magnífico donde crecen felices estos árboles milenarios, sagrados para los celtas y una de las especies más longevas del mundo. En cuanto al myosotis, que en griego significa “oreja de ratón” por sus hojas redondeadas recubiertas de pelos, es una flor muy pequeñita, azulada, y con el corazón amarillo, símbolo del amor y la fidelidad.

martes, 16 de junio de 2009

El bosque de Poda

El bosque de Poda, un magnífico hayedo que se extiende al oeste del collado de Taruey, por la canal que baja hacia el pueblecito de Lebeña. El desfiladero de La Hermida es la entrada natural a la comarca de la Liébana; en Potes confluyen las aguas del Bullón y del Quiviesa, procedentes de Piedrasluengas y de San Glorio respectivamente, con las del Deva, bajando entonces todas juntas buscando el mar. Los bosques de hayas son uno de los más hermosos que se puedan encontrar; un bosque verde, fresco y lleno de vida, donde el musgo tapiza los troncos de los árboles. Liébana infinita…

lunes, 15 de junio de 2009

Mar de nubes

Mar de nubes. En Picos, entre montañas y nubes que ocupan todo el desfiladero. Al fondo, las cumbres del macizo occidental. Por debajo planean los buitres. Bosques de hayas, castaños enormes, avellanos… Y los enormes tejos milenarios de la braña de los tejos. La Liébana, un paraíso…

domingo, 14 de junio de 2009

En el collado Arcedón

Desde Lebeña a la braña de los Tejos. Sobrepasadas las nieblas el sol disipa las últimas nubes y surge un paisaje verde, rodeado de montañas, con vacas y caballos correteando por el monte. El mar de nubes ocupa el fondo de los valles.

jueves, 11 de junio de 2009

En el cielo blanco


Nubes, azul y blanco, ¡¡¡menudo pájaro!!! Ahí sí que se debe ir bien, dominado el panorama y contemplando el paisaje cuando las nubes lo permiten. Topografía al natural desde una posición absolutamente privilegiada. Una de las actividades más ansiadas desde los tiempos de Ícaro, a quién el sol derritió la cera de sus alas dando al traste con todas sus pretensiones. Desde entonces la ciencia y la técnica han evolucionado una barbaridad.

miércoles, 10 de junio de 2009

Mágicas formaciones

Piedras, bloques inverosímiles en inimaginables equilibrios aparentemente estables. Sin embargo la Pedriza se mueve, algunos signos así lo indican a pesar de su aspecto impertérrito y circunspecto. En mi último paseo, el domingo pasado, descubro un enorme bloque que arrastra a su paso todo lo que se le pone por delante. Se encuentra en uno de los recodos al comienzo de las zetas que ascienden al collado de la Ventana. Parece increíble pero la base sobre la que se asienta cede paulatinamente hasta conseguir su desprendimiento, justo en el momento en que alcanza su punto óptimo de madurez. No es más que una cuestión de tiempo. Ese debió ser el origen de El Tolmo y de la desaparición de la Cabeza del Predicador. Composiciones fantasmagóricas, mágicas formaciones de piedra.

martes, 9 de junio de 2009

El Mogote de los Suicidas

El Cancho Rasgao o Mogote de los Suicidas, se encuentra al pie del cancho de la Herrada, en las inmediaciones de la pradera de Navajuelos. Bloques increíbles, superpuestos de un manera absolutamente inverosímil. El mogote fue ascendido por primera vez en el año 1947 por Félix Méndez, Santiago Heredero, Manuel Morales, José Gómez y Constantino Díaz… Desde entonces, y por lo suicida de su hazaña, se conoce con este curioso nombre. Las matas de cantueso, en primer plano, proporcionan un bonito toque de color.

lunes, 8 de junio de 2009

Pastores, cabreros y trajinantes

El monumento a los primeros caminantes de la Sierra de Guadarrama, en la pradera de Navarrulaque, dedicado como muy bien se indica, a pastores, cabreros y trajinantes, gabarreros, poetas, científicos, institucionistas, montañeros, y tantos otros más, conocidos o desconocidos, que ayudaron a descubrir las bellezas del Guadarrama. Un bonito paseo recordando a los pioneros: los miradores de Luis Rosales y de Vicente Aleixandre, el reloj de Cela, la senda Herreros, la pradera de Majalasna y la senda de los Alevines, el camino Schmid, la fuente de Antón Velasco, la senda Victory, la fuente de Díaz Luque, el camino de las Encinillas y Don José Aguinaga, promotor de Camorritos, para acabar en "Las Eras y los Castaños", uno de los primeros apeaderos del tren eléctrico que sube al puerto de los Cotos.

domingo, 7 de junio de 2009

La Pedriza es mi jardín

Hoy estuve paseando de nuevo por la Pedriza después de un mes sin pisarla. Jardines secretos y solitarios, tocados por la hermosura de la primavera. Salí sólo y apenas encontré gente; así pude disfrutar de un agradable paseo de cuatro horas por senderos poco transitados (realmente arriba no me cruce con nadie). El día comenzaba soleado y con cielo azul, pero iría cambiando a lo largo de la mañana. Por la noche había estado lloviendo y las jaras aparecían espléndidas, sin embargo, a media mañana, las nubes negras comenzaron a surgir por detrás de la cuerda de las Milaneras. Algunas flores, además de las jaras, rosas silvestres, matas de cantueso…
Me dirigía al Cancho Butrón y la “vía Libertad”, y me encontré con un estupendo jardín a sus pies. Un árbol montañero se aferraba a las piedras, un serbal en plena floración con todas sus hojitas verdes. El jardín se extendía prácticamente hasta la pradera de Navajuelos. Un caos espectacular de bloques y piedras. Acabo con la visita a uno de los lugares históricos de la Pedriza, el chozo Kindelán, un emblemático refugio escondido entre jarales.

sábado, 6 de junio de 2009

Las montañas son azules

Siempre he tenido la certeza de que las montañas son azules, aunque a veces los sentidos nos engañen. Azules en el Guadarrama, azules en Pirineos y azules en la cumbre del Colativí; los tonos y colores pueden variar según las circunstancias pero su esencia sigue siendo azul. Pintores y poetas buscaron las montañas como fuente de inspiración y expresión de su arte. Machado sin ir más lejos plasma sus recuerdos camino de Valsaín:
¿Eres tú, Guadarrama, viejo amigo, la sierra gris y blanca, la sierra de mis tardes madrileñas que yo veía en el azul pintada?
Hoy estuve paseando por el valle de la Fuenfría acompañado por mis propias soledades; el día era gris, medio lluvioso, apenas me crucé con montañeros o caminantes. Cuando abría el cielo, los azules contrastaban contra el amarillo de las flores. Uno de esos días que se disfrutan a tope deambulando sin prisa, subiendo y bajando, parando a echar un trago de agua o sacar alguna foto…

viernes, 5 de junio de 2009

Armeria montana

Armeria montana en la cresta de Claveles. “El día antes de la felicidad” de Erri de Luca (camionero, obrero y albañil, escritor y traductor de la Biblia, montañero…) y “Ayudar a morir” de Iona Heath, con un prefacio y doce tesis de John Berger (qué contradicción, la vida y la muerte, la felicidad y el ocaso). La Dra. Heath acaba de ser nombrada presidenta del Royal Collegue inglés. Precisamente hoy leo sobre la muerte del protagonista de Kung Fu, el Pequeño Saltamontes, el monje shaolín Kwai Chang Caine que se venga de la muerte de su mentor, el maestro Po, asesinado por el sobrino del emperador de China, y que huye de la persecución de los matones chinos a lo largo de Estados Unidos, mientras se dedica a hacer el bien y a resolver todo tipo de entuertos. “El cuerpo estaba colgado de una soga en el armario de la habitación” en un hotel de Bangkok, donde rodaba una película. David Carradine nació en Hollywood en el año 1936 y fue el mito de toda una generación.

jueves, 4 de junio de 2009

Amapola prisionera

Una amapola que crece al otro lado de la valla de alambre, en la escasa tierra que permanece entre los troncos y tocones apilados durante todo el invierno. Destaca el rojo de la corola entre la diversa gama de grises. Realmente no hay truco ni engaño, la imagen era tal como la presento, sin ningún retoque ni modificación. No siempre es fácil captar el instante que el ojo percibe; simplemente se trata de encuadrar y disparar en el momento preciso.

miércoles, 3 de junio de 2009

La siesta de los caballos

Mientras el pequeño se estira y vaguea sobre la hierba verde y fresca, la madre me mira torcido, como los miuras, vigilando cada uno de los movimientos que realizo en estos momentos. Se percibe la clara intención de que nada turbe el descanso de su retoño, mostrando su evidente disposición a defenderle con uñas y dientes. La cría, por su parte, ni se inmuta, tiene a la madre al lado y se siente protegida. Al fondo el cielo amenaza tormenta. Es la hora de la siesta.

martes, 2 de junio de 2009

Siete Picos desde Valsaín

Un día caluroso y cargado de nubes. A media tarde se monta la tormenta y las cortinas de agua son visibles en algunos tramos del cielo. La humedad asciende desde los pinos que cubren las montañas, creando una atmósfera irreal. Una imagen dinámica merced a las acrobacias de los pájaros enloquecidos por la meteorología. Se palpa la electricidad ambiental. El contraste de la sierra con el tejado rojizo, las hojas verdes de los castaños y la torre semi derruida del antiguo palacio real, acaba de proporcionar el toque que contribuye a crear uno de los momentos fantasmagóricos y especiales que se viven en la montaña…
Es preciso estar ahí, captar el brillo del instante, disfrutar de los escasos minutos antes de que desaparezca la magia.
Al fondo los Siete Picos desde la vertiente segoviana. Cierto que solo se distinguen seis pues Majalasna, el primero y el situado más a la derecha de la imagen, queda oculto por sus hermanos al ser el más bajito de todos. Entre las nubes aparecen retazos de cielo azul.

lunes, 1 de junio de 2009

Laguna entre montañas

Aparecen nubes blancas por detrás de las crestas y la nieve, que todavía se mantiene en las laderas de la montaña, se refleja sobre el agua imitando la piel de un leopardo gigante. La laguna de los Pájaros se encuentra por encima de los dos mil metros, un territorio mítico y sutil en el macizo de Peñalara.