jueves, 28 de abril de 2011

Otro punto de vista

La misma cascada, otro punto de vista. Agua lenta, como si fuera un río de leche o una vía láctea en plena montaña. Es divertido buscar el mejor sitio e intentar detener el tiempo, aunque esto no sea más que un ejercicio de la imaginación.

martes, 26 de abril de 2011

Una pequeña cascada

Estos días de primavera pasada por agua, da gusto salir al campo y encontrar rincones escondidos donde salta el agua transformando las gotas en una fina película como en los cuentos de princesas y enanos del bosque. Verde y blanco.

sábado, 23 de abril de 2011

Jugando con el Carrión

En Triollo, montaña palentina, jugando con el joven Carrión

domingo, 17 de abril de 2011

Por el bosque de hayas

Pasear por un bosque de hayas es como leer poesía, un acto íntimo y secreto que proporciona muchas satisfacciones. Hay que pasear en silencio, disfrutando del momento, de la magia y de los colores, intentado que nada nos altere y que nada escape a nuestros sentidos (imposible en cualquier caso pero siempre es bueno mantener viva la ilusión). Un bosque de hayas es la perfecta combinación de sueños e ilusiones, de magia y de secretos. Lo dicho, pura poesía...

jueves, 14 de abril de 2011

El sol se acuesta

En estos meses primaverales, con los cielos despejados, es una delicia esperar el momento del atardecer para intentar pillar el sol justo en el momento en que se va a acostar.

martes, 12 de abril de 2011

La flor del melocotón

En casa, cada año, es esta pequeña y delicada flor del melocotón la que señala inequívocamente el comienzo de la primavera, un testigo mudo que con el paso del tiempo afianza su certeza pronóstica. Probablemente los más de diez años que lleva viviendo en una maceta señalen la necesidad de buscarle una mejor ubicación. Sin embargo, cada primavera nos muestra su dicha y alegría con esta fantástica explosión de color y a mi el sólo hecho de pensar en modificar sus condiciones ambientales me produce un miedo terrible.

sábado, 9 de abril de 2011

Revisando periódicos viejos

Hoy me entretengo toda la mañana revisando periódicos viejos, una de las actividades que más me gusta realizar los fines de semana que no salgo a pasear por el monte. A pesar de mis iniciales intenciones de acercarme a fotografiar una cascada muy hermosa y muy escondida en plena sierra, la cena de anoche, las copas y el trasnochar alteran mis biorritmos y me impiden realizar los planes programados. Recopilo los periódicos atrasados de toda la semana y los reviso concienzudamente, copiando algún texto, escribiendo sobre alguna cosa que me llama la atención. Así descubro con emoción un alter ego musical:

José González, cantautor sueco de padres argentinos: “un joven solista ensimismado de composiciones estáticas y armonía persistente, como si fabricara pequeños juguetes minimalistas. Canta con voz vulnerable, mira absorto hacia sus manos y parece abrumado por un público que no pestañea durante las interpretaciones y prorrumpe en vítores a cada final”.

Todo este montón de periódicos aún permanecerá apilado en la cocina durante algunos días más, sobre todo por si necesitara echar mano de las palabras y artículos que permanecen rondado en mi cabeza tras la atenta relectura, antes de eliminarlo definitivamente arrojándolo al contenedor de papel situado justo enfrente del portal. Eso hasta que pongamos la chimenea porque entonces los montones y montones de papeles atrasados tendrán una finalidad mucho más provechosa.

viernes, 8 de abril de 2011

Loa arroyos más cantarines

Las corrientes saharianas acercan una ola de calor que se nota en toda la ciudad. Es el momento de salir huyendo, viernes tarde, fin de semana tras una larga semana, el momento preciso de escapar al monte y buscar los parajes más frescos y solitarios, los arroyos más escondidos y las aguas más cantarinas...

martes, 5 de abril de 2011

Un rincon fresquito

Un rincón verde y fresquito colonizado por las hayas y el musgo, con agua y sombra donde prosperar, donde se confunden los sentidos y dejamos vagar la imaginación. En este caso, de nuevo por la cara norte de la sierra de la Demanda, muy cerca del techo de Burgos.

sábado, 2 de abril de 2011

Agua de montaña

Agua de montaña en busca de la mar. A pesar de la dureza y aridez de las tierras castellanas, aún es posible encontrar algunos bosques, en la cara norte de las montañas, donde crecen las hayas y los torrentes se despeñan, alegres y cantarines, rodeados de musgo y vegetación. El agua se desmelena en su alocado transitar, buscando nuevas y mejores alternativas que jamás encontrará. Y en esa carrera sin fin, transforma energía en belleza.

viernes, 1 de abril de 2011

Hoja seca

Es la hora de la primavera y de las hojas nuevas en los árboles. Aparecen pequeños brotes por cualquier sitio, algunas flores tempranas, almendros, crocus, narcisos amarillos en las praderas donde se retira la nieve a sus cuarteles de invierno. Sin embargo todavía es posible encontrar, abandonada y perdida, alguna hoja del otoño pasado que ha logrado sobrevivir sin corromperse, seguramente gracias a la ausencia de humedad, preservando su estructura alada y sutil como inertes alas de mariposa, esqueleto vegetal, momia ajada. Arrugada ausencia de lo que fue y no volverá, la hoja seca se arrastra por el suelo a merced de vientos y pisotones.