Las estaciones en Japón suelen estar bastante bien marcadas: primavera, verano, otoño e invierno, cada una con sus ventajas y sus encantos pero también con sus inconvenientes. El invierno en Sapporo es muy crudo pero el mes de febrero permite visitar el inigualable Festival de la Nieve, con gigantescas esculturas de hielo ocupando el parque Odori. La época de lluvias abarca desde mediados de junio a mediados de julio y las predicciones no suelen errar. En Tokio y en Kyoto, además de la humedad, suele hacer mucho calor, de manera que las actividades turísticas resultan bastante agotadoras pero también tiene su encanto visitar templos bajo la lluvia, con un calor de mil demonios.
2 comentarios:
Preciosas las gotas de agua en el pino!
Tanta humedad unida al calor debe de ser bastante agobiante
Que pases un buen fin de semana
Un beso
Gracias Begoña. Tras la etapa japonesa, de nuevo un finde de monte. Besos,
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