El día de ayer realmente fue un día hermoso, nítido y limpio tras la gran nevada que colapsó toda la ciudad. Un sol brillante destacaba en el cielo azul, jugando al escondite con los troncos de los pinos, no como esta mañana gris y mortecina pasada bajo el agua y el frío. Cómo cambia el tiempo de un día para otro, difícil adaptarnos a los cambios a pesar de las previsiones. Parece que el frío polar remite, veremos como acaba todo esto. Me encantan los azules a flor de piel; la imagen es de ayer en la Dehesa de la Villa.
5 comentarios:
Un juego de luces y sombras soberbio. Un toma bellísima. Un abrazo.
El manto blanco que resalta los pinos de la Dehesa, salpicado de pequeños "granos" que le salen del suelo.
Un abrazo
el lio de Abi
Pa que luego digan que Madrid es feo, je, je, je!!!... Muy guapa!!!... Abrazos Esgalleros!!!
Que alegría ver un rayo de sol...la verdad es que llevamos muchos días de mal tiempo, se agradece que nos recuerdes que el sol existe!!!
Un saludo.
A ver si sale de verdad el sol y podemos aprovechar por el monte porque no sé qué va a ser de mi con tanto paseo urbano. Hoy hemos tenido agua durante todo el día, una jornada bastante desapacible. Abrazos,
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