martes, 10 de noviembre de 2009

Nieve en la Liébana

Dobres y Cucayo, dos pequeñas aldeas perdidas entre las montañas de la Liébana que separan los Picos de Europa del valle de Pineda y las montañas palentinas. El comienzo de la mañana del sábado parecía prometer un día agradable; sin embargo las condiciones climatológicas adversas impidieron disfrutar de un día completo pero nos permiten soñar con una nueva incursión por esta bonita zona. En fin, un fin de semana pasado por la nieve.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Las lagunas de Neila

De repente pasamos de los cálidos tonos del otoño al gélido invierno. Fin de semana de temporal, con ventiscas y tormentas de nieve en las cumbres. Por las inmediaciones de la Liébana el pasado sábado (en la zona de Dobres-Cucayo), el domingo atravesamos el puerto de San Glorio con la quitanieves abriendo camino; esta mañana un paseo invernal hasta las lagunas de Neila, con la carretera cortada. Niebla, ventisca, nubes… un momento luminoso en las lagunas más altas, la Negra y la Larga, que es la que aparece en la imagen.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Hojas de otoño

Hojas secas que ocultan los senderos, colores de otoño, musgo verde, piedras y raíces, diferentes tonos según el capricho de la estación, fríos y viento. Hayedos, los bosques más hermosos que podamos encontrar…

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Secretos del bosque

No hay más que fijarse con cuidado pues entre las hojas secas aparecen de vez en cuando regalos increíbles. En esta ocasión una pareja de setas con sombrero conocidas como bolets de tinta o coprino blanquinegro (coprinus picaceus) crecen entre la hojarasca, recordando las setas de los enanitos.

martes, 3 de noviembre de 2009

Los rojos de las hayas

Los rojos de las hayas con su alfombra vegetal, entre los ocres y amarillos. El hayedo de Montejo es una maravilla natural de especial protección. Hace años que no paseaba por aquí, el tener que pedir cita siempre condiciona la visita, aparte de los cien kilómetros que separan el paraje de la capital. En otoño y en fin de semana es prácticamente imposible acercarse al estar controladas las visitas pero esta vez han coincidido un cúmulo de circunstancias favorables que me permiten disfrutar de una tarde agradable a pesar de la escasa luz que se filtra en el hayedo.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Hayedo de Montejo

Un paseo vespertino por el hayedo de Montejo, un paraje natural de un encanto y una belleza inigualables. Enormes hayas con sus hojas de colores ocupan una ladera protegida junto al Jarama recién nacido, una alfombra mullida donde alternan las hojas de roble con las de haya. Un verdadero placer tanto para el cuerpo como para el espíritu y una espléndida manera de comenzar la semana.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Otro atardecer en Quintana

Diez segundos con el 10 mm. y el diafragma lo más cerrado posible. Esa hora mágica de las últimas luces una vez que el sol se oculta tras los árboles. Vegetación de ribera; los ocres y amarillos junto con el azul que se refleja en el espejo del agua componen una imagen relajante que me permite cargar las pilas para toda la semana.