
Un árbol solitario y desnudo en la inmensidad de la nieve. Montañas y montañas, nubes blancas y retazos de cielo azul a la caída de la tarde. Menos mal que el día fue excelente y pudimos disfrutar sin medida. Al fondo, arriba a la derecha, dos personitas dan idea de la dimensión del paisaje, caminando por el sendero que se adivina en la ladera nevada. Ante tal inmensidad uno se da cuenta de lo pequeños que somos, apenas un soplo en la montaña.
8 comentarios:
Que pasada de foto!... enhorabuena JG!!!... Un Abrazo Esgallero!!!
La luz de las nubes, la soledad del arbol y la inmensidad de la belleza.... una composicion expectacular.
Besos
Muy guapa la foto. Por cierto vaya nuibes se ven al fondo. ¿descargó algo?
Un saludo
Hasta el árbol parece haberse puesto de acuerdo contigo, inclinandose para que la foto sea perfecta.
Un abrazo
el lio de Abi
Joooo, qué guapaaa...
Llévame contigo a esos sitios :)))
Tuvimos suerte y pasamos un día espléndido, después de una larga mañana con sol y cielo azul al final aparecieron las nubes pero no nos cayó ni una gota de agua. Me pareció un contrate bonito, casi casi no hace falta el color. Por cierto Mariluz, en cualquier momento organizamos una y nos vamos a afotar por las montañas. Además esas montañas del norte tu las tienes bien cerca (como Vidal y Cienfuegos). A lo demás nos cuesta un poquito más pero merece la pena. Besos,
La conquista de la soledad.
La naturaleza muestra un montón de lecciones para un ser humano.
¡Vaya! Ese arbol me suena mucho.
Claro que no necesita color, si la pasas a blanco y negro queda fenomenal... eso te lo aseguro.
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