
Nada más sencillo y hermoso que una simple hoja teñida por los colores del otoño e iluminada por el mágico rayo de luz que consigue, a la vez que la ruboriza, sacarle lo mejor de si misma. Sus compañeras, en cambio, permanecen tristes y oscuras, pasan desapercibidas, realzando la belleza de la protagonista de la jornada. Real como la vida misma, reflexiones de una fría tarde de sábado. Un tiempo empleado en revisar algunas imágenes pendientes de salir a la luz… Esta, en concreto, pertenece al periplo japonés, pues no en vano se trata de un arce palmeado del Japón, todo un símbolo por aquellas lejanas tierras.
10 comentarios:
Preciosa!... Gracias... un abrazo esgallero!!!
Precioso contraste de colores...y bonitas formas...parece un bordado.
Besos
Me suelen gustar mucho todas tus fotos, pero esta es .... espectacular. Preciosa.
Un saludo
Preciosa imagen, un contraste justo y selectivo. muy bonita.
Una bellísima y delicada composición.
Me encanta!
Besos
Varios días sin coger el ordenador y me encuentro en tu Blog, varias bellezas, como esta sobresaliente hoja rojiza, o el espejo natural, o ese domingo en la Pedriza.
Un abrazo
Gracias amigos, da gusto sentir que hay alguien al otro lado y que las palabras e imágenes llegan y producen emociones. Ese es mi objetivo. Muchas gracias por estar ahí, junto con mi calurosa bienvenida a Cienfuegos. Saludos,
Qué maravilla de foto, esa hoja brilla con luz propia. Precioso y delicado detalle otoñal. Me encanta!!
Preciosa imagen... además el Acer palmatum es uno de mis preferidos en jardinería...
Gracias por compartirla!!
Un saludo.
Es un árbol precioso; la combinación de colores otoñales es sin duda lo mejor. Todo un sómbolo en Japón. Saludos,
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